Desde que existen las mesas de sonido para eventos en directo tenemos, al menos, dos formas de ajustar la ganancia para mezclar en directo: Una sería ajustar primero la ganancia y subir fader después a la posición que necesitemos para que el sonido esté en el plano deseado, y la otra sería poner el fader a cero y después ajustar ganancia al nivel que necesitemos que esté el sonido.

En este artículo vamos a hablar de estas dos opciones pero también de una tercera opción que combina lo mejor de las dos opciones clásicas, y que realmente va a mejorar el resultado final . Pero veamos más en detalle las ventajas y desventajas de estos métodos…

Opción 1: Ajustar la ganancia primero y subir el fader después.

Esta opción es muy adecuada para obtener una buena relación señal-ruido de la señal. Recordemos que los micrófonos generan una señal muy pequeña, apenas unos milivoltios, que necesitamos amplificar. Este es el método de ajustar niveles que generalmente se explica en los manuales de las mesas de mezclas.

En qué consiste: Ponemos el canal que queremos ajustar en PFL y, visualizando el medidor de la mesa de mezclas, ajustamos la señal para que quede cerca del nivel nominal de trabajo de la mesa (generalmente en torno +4dbu. Si trabajamos con una mesa analógica buscaremos que marque en torno a 0 en el medidor, y si es mesa digital sobre menos -18dBFS).

Ventajas: Si ajustamos la ganancia de tal manera que la señal del micrófono ronde el nivel nominal de trabajo de la mesa de mezclas, obtendremos una señal muy bien ajustada: lo suficientemente amplificada para que quede lejos del ruido de fondo de los equipos y lo suficientemente baja como para que no distorsione. El previo de micro estará trabajando en su punto óptimo y el sonido será de mejor calidad.

Desventajas: Al ajustar la ganancia de esta manera, las posiciones de los faders de la mesa van a ser aleatorias, de tal manera que no tenemos puntos de referencia. Con aleatorias me refiero a que cada fader quedará situado en una posición de su escala que nada tendrá que ver con las demás. Además, si el fader se nos queda demasiado abajo, la precisión es menor al querer subir o bajar unos dbs (recordemos que el fader funciona de manera logarítmica).

Opinión personal: Esta opción para mí no es útil en directo, pues me gusta tener una posición de referencia clara en los faders para iniciar una mezcla o reiniciarla al empezar un nuevo tema. Es decir, me gusta tener todos los faders en la posición de 0dB y que la mezcla esté equilibrada. A partir de ahí, durante el tema, puedo subir o bajar, pero sé que mi posición de referencia en principio es 0dB. Y con esta técnica no podría hacer eso. En el estudio de grabación sí que es útil ajustar así las ganancias, pues allí  interesa priorizar la relación señal-ruido y no es tan importante la posición de los faders, ya que disponemos de otras herramientas para mezclar como puede ser la automatización de volúmenes.

Cada fader nos quedará en una posición distinta.

Opción 2: Poner el fader del canal a 0 y ajustar la ganancia después.

Esta opción permite que al acabar una prueba de sonido todos los canales estén en ganancia unidad (posición 0dB).

Método: Levantamos el fader del canal a la posición 0db. Subimos ganancia hasta llegar al nivel deseado para nuestra mezcla.

Ventajas: Con este sistema podemos hacer que todos los faders se nos queden en la posición 0dB al finalizar la prueba de sonido. Lo cual es óptimo porque tenemos los faders en la posición de trabajo más precisa (podemos subir y bajar el nivel de la señal con mucha precisión) y además tenemos una posición de referencia para “reiniciar” nuestra mezcla, por ejemplo al terminar una canción o al subir o bajar algún canal durante un momento puntual.

Desventajas: Con este tipo de ajuste no optimizamos la relación señal ruido. A algunos canales, sobre todo los que tengan que estar más bajos que otros en mezcla, les vamos a aplicar menos ganancia de la que aplicaríamos si buscásemos obtener una buena relación señal-ruido de esa señal. Si el equipo de P.A. está sobredimensionado, nos veremos trabajando con poca ganancia y por tanto, peor relación señal-ruido.

Opinión personal: Este es el método que he utilizado durante muchos años en sonorizaciones en directo, cuando las mesas no tenían un “trim” o un control de ganancia digital independiente de la ganancia analógica. Si algún canal se me quedaba muy bajo de ganancia, lo que hacía era aplicarle 5 o 10dB de ganancia más y dejarme el fader del canal en una posición de -5 o -10dB que me sirviese de referencia.

Así se me suelen quedar a mi los faders después de una prueba si utilizo este método.

Opción 3: Ajustar ganancia analógica primero, poner el fader a 0 y terminar de ajustar con ganancia digital.

Esta opción es la que nos va a permitir conseguir una estructura de ganancia excelente y un control preciso de la señal. Las dos cosas no se conseguían con las opciones anteriores, pero con este método si lo conseguiremos. Es imprescindible que la mesa tenga un control de ganancia digital (también llamada muchas veces trim)

Método: Poner el canal que queremos ajustar en PFL y, visualizando el picómetro, ajustamos la ganancia analógica del canal para que quede cerca del nivel nominal de trabajo de la mesa (+4dbu, 0 en medidor de mesa analógica, sobre menos -18dBFS en escala digital) y a partir de ahí, empezamos a subir el fader y a atenuar con la ganancia digital (trim) hasta que el fader se quede a 0dB y el nivel sea el que queremos para la mezcla.

Ventajas: Conseguiremos las ventajas de los dos métodos anteriores: Una muy buena señal a la hora de convertir de analógico a digital (A/D) y una posición del fader muy precisa para hacer la mezcla.

Desventajas: Este ajuste requiere más tiempo que cualquiera de los dos primeros métodos, pues exige ajustar dos ganancias. No lo recomiendo en pruebas de sonido que tengan que ser rápidas.

Opinión personal: Si hay tiempo suficiente para la prueba, este es el método que yo prefiero y el que mejores resultados sonoros aporta, al entrar todas las señales al conversor a un nivel óptimo. Hay una diferencia sonora para mí bastante evidente, pero no quiero sentar cátedra, así que lo que os recomiendo es que lo probéis. Teóricamente tiene sentido, pues por un lado tenemos Es cierto que es un proceso más tedioso, pero es tiempo invertido en ganar un poquito más de calidad. Y todo va sumando…

Y así se quedan después de la prueba ajustando primero ganancia, luego subiendo el fader y finalmente reajustando con el trim o ganancia digital.

En fin, si no habéis probado esta técnica os recomiendo que la probéis, y ya me contaréis qué os parece. Como siempre, si el artículo os ha parecido interesante, agradecería un comentario o que lo paséis a quien pueda interesar.